18 de diciembre de 2011

18 De Diciembre; LA EXPECTACION DEL PARTO DE NUESTRA SEÑORA

Los padres del décimo concilio de Toledo (656) instituyeron la fiesta que se llamó muy pronto de la Expectación del Parto, y que debía celebrarse ocho días antes de la solemnidad natalicia de nuestro Redentor, o sea el 18 de diciembre. La razón de su institución la dan los padres del concilio: no todos los años se puede celebrar con el esplendor conveniente la Anunciación de la Santísima Virgen, al coincidir con el tiempo de Cuaresma o la solemnidad pascual, en cuyos días no siempre tienen cabida las fiestas de santos ni es conveniente celebrar un misterio que dice relación con el comienzo de nuestra salvación. Por esto, “speciali constitutione sancitur, ut ante octavum diem, quo natus est Dominus, Genitricis quoque eius dies habeatur celeberrimus, et praeclarus”; “Se establece por especial decreto que el día octavo antes de la Natividad del Señor se tenga dicho día como celebérrimo y preclaro en honor de su santísima Madre”.
En este decreto se alude a la celebración de tal fiesta en “muchas otras Iglesias lejanas” y se ordena que se retenga esta costumbre; aunque, para conformarse con la Iglesia romana, se celebrará también la fiesta del 25 de marzo. De hecho, fue en España una de las fiestas más solemnes, y consta que de Toledo pasó a muchas otras iglesias, tanto de la Península como de fuera de ella. Fue llamada también “día de Santa María”, y, como hoy, de Nuestra Señora de la O, por empezar en la víspera de esta fiesta las grandes antífonas de la O en las Vísperas.
Además de los padres que estuvieron presentes en el décimo concilio de Toledo, en especial del entonces obispo de aquella sede, San Eugenio III, intervino en su expansión—y también a él se debe el título concreto de Expectación del Parto—aquel otro gran prelado de la misma sede San Ildefonso, que tanto se distinguió por su amor a la Señora. La fiesta de hoy tiene en los antiguos breviarios y misales su rezo y misa propios. Los textos del oficio, de rito doble mayor, tienen, además de su sabor mariano, el carácter peculiar del tiempo de Adviento, a base de las profecías de Isaías y de otros textos apropiados como los himnos. Nuestro Misal conserva todavía para la presente fecha una misa, toda a base de textos del Adviento. Es un resumen del ardiente suspiro de María, del pueblo de Israel, de la Iglesia y del alma por el Mesías que ha de venir. Sus textos—casi coinciden con la misa del miércoles de las témporas de Adviento, y todavía más con la misa votiva de la Virgen, propia de este período—son de Isaías (introito, epístola y comunión ) y del evangelio de la Anunciación. Las oraciones son las propias de la Virgen en el tiempo de Adviento.
Precisamente en la víspera de este día dan comienzo las antífonas mayores de la O, por empezar todas ellas con esta exclamación de esperanza. Y así continúa la Iglesia por espacio de siete días, del 17 al 23, en este ambiente de santa expectación y demanda de la venida del Salvador.
Nada, pues, más a propósito que la contemplación de María en los sentimientos que Ella tendría en los días inmediatos a la natividad de su divino Hijo. “Si todos los santos del Antiguo Testamento—escribe el padre Giry (Les petits Bollandistes t. 14 p.373 ) — desearon con ardor la aparición del Salvador del mundo, ¿cuáles no serían los deseos de Aquella que había sido elegida para ser su Madre, que conocía mejor que ninguna otra criatura la necesidad que tenia la humanidad, la excelencia de su persona y los frutos incomparables que debía producir en la tierra, y la fe y la caridad, que sobrepasan la de todos los patriarcas y profetas? Fue tan grande el deseo de la Santísima Virgen, que nosotros no tenemos palabras para expresar su mérito. Y tampoco podemos concebir cuál fue su gozo cuando Ella vió que sus deseos y los de todos los siglos y de todos los hombres iban a realizarse en Ella y por Ella, ya que iba a dar a luz la esperanza de todas las naciones, Aquel sobre quien se fijaban los ojos de todos en el cielo y en la tierra y miraban como a su libertador.”
María, repetimos, está en la cumbre de esta esperanza o, con otras palabras: con María la esperanza es completa, se hace firme. Unidos a Ella, ya que nuestro adviento, el que nosotros esperamos, tuvo principio en la celestial Señora, por haber llevado en su seno virginal a Jesús durante nueve meses, nuestra expectación será más digna del gran Señor que va a venir.
María presenta para el cristiano de hoy la posición que éste debe mantener, máxime en estos días: esperar al Señor. Que Él se incorpore más y más en nosotros, donec formetur Christus in nobis, y que un día, lejano o próximo ya, venga a buscarnos para unirnos definitivamente con Él. El cristiano debe esperar al Señor, donec veniat, hasta que venga para aquel abrazo de unión indisoluble y eterna. Toda la vida del cristiano es una expectación. El modelo de ésta lo ofrece la Santísima Virgen María.
La presente fiesta mariana, como todas las de la Virgen, además de ser un ejemplo, es una intercesión. Debe servir para afianzar y hacer más intensa esta espera y ayudarnos a cantar con Ella, con la Iglesia-Virgen las antífonas mayores del Magniticat: O Sapientia, O Adonai, O Emmanuel…
ROMUALDO Mª DÍAZ CARBONELL, O. S. B.

15 de diciembre de 2011

LA BANDERA DE EUROPA


El significado de la bandera de Europa
LA RAZÓN / Javier Peredes

Arsène Heitz es un artista de la ciudad de Estrasburgo. Aunque su nombre no es muy conocido, sin embargo una de sus creaciones se despliega al viento, como símbolo de todos los europeos. En efecto en 1950 el Consejo de Europa convocó un concurso de ideas para confeccionar la bandera de la recién nacida Comunidad Europea. Heitz, entre otros muchos diseñadores, presentó varios proyectos, y uno de ellos resultó ser el elegido, ése que hoy todos conocemos: doce estrellas sobre fondo azul.

Hace unos años, Heitz desveló a la revista francesa Lourdes Magazine cuál fue el motivo de su inspiración. En aquellas fechas, dice él, leía la historia de las apariciones de la Santísima Virgen en la Rue du Bac de París, que hoy es conocida como la Virgen de la Medalla de la Milagrosa. Y según el testimonio del artista, concibió las doce estrellas en círculo sobre un fondo azul, tal como la representa la iconografía tradicional de esta imagen de la Inmaculada Concepción. En principio Heitz lo tomó como una “ocurrencia", entre las muchas que fluyen en la imaginación del artista; pero la idea despertó su interés, hasta el punto de convertirse en motivo de su meditación.

Por lo que dice en la revista, Heitz acostumbra a escuchar a Dios en su interior; es decir reza con el corazón y con la cabeza. Se declara un hombre profundamente religioso y devoto de la Virgen, a quien ni un solo día deja de rezar el Santo Rosario en compañía de su mujer. Y por todo ello concluye que en su inspiración confluyen además de sus dotes de artista, esas voces silenciosas que el cielo siempre pronuncia sobre los hombres de buena voluntad, de los que sin duda Heitz forma parte. Un artista que casi al final de su vida y en el cénit de su carrera, puede proclamar con la garantía de la autenticidad que concede ese momento, en el que los cosas que interesan son ya muy pocas pero muy importantes, que se considera un hombre que ama a todo el mundo, pero sobre todo a la Santísima Virgen, que es nuestra madre.

Es cierto que ni las estrellas ni el azul de la bandera son propiamente símbolos religiosos, lo que respeta las conciencias de todos los europeos, sean cuales sean sus creencias. En este sentido, cuando Paul M. G. Lévy, primer director del servicio de prensa e información del Consejo de Europa, tuvo que explicar a los Miembros de la Comunidad Económica el sentido del diseño, interpretó el número de las doce estrellas, como “guarismo de plenitud", puesto que en la década de los cincuenta no eran doce ni los miembros de dicho Consejo, ni los de la Comunidad Europea. Pero no fue ese el verdadero motivo de inspiración del artista que diseñó la bandera de Europa. En el alma de Heitz habían estado presentes las palabras del Apocalipsis: Una gran señal apareció en el cielo, La Mujer vestida de sol y la luna bajo sus pies, y en su cabeza una corona de doce estrellas. Y sin percatarse, quizás, los delegados de los ministros europeos adoptaron, oficialmente, la enseña propuesta por Heitz en la fiesta de la Señora: el 8 de diciembre de 1955. Muchas casualidades, como para que a partir de ahora no nos sea difícil descubrir entre los pliegues de nuestra bandera de europeos la sonrisa y el cariño de Nuestra Madre, la Reina de Europa, dispuesta a echarnos una mano en ese gran reto, que nos propuso el sucesor de San Pedro, Juan Pablo II: recristianizar el Viejo Continente con el ejemplo de nuestras vidas y el testimonio de nuestra palabra. Y todo un recurso para que acudamos a Nuestra Madre, la Santísima Virgen, para que nos ayude a defender esos valores innegociables a los que continuamente se refiere Benedicto XVI: la vida desde el momento de la concepción hasta la muerte natural, la familia natural como unión indisoluble entre un hombre y una mujer basada en el matrimonio y abierta a la vida, el derecho de los padres a la educación de sus hijos, el bien común y las raíces cristianas de Europa.

9 de diciembre de 2011

10 de Diciembre NUESTRA SEÑORA DE LORETO


La Santa Casa de Loreto es la misma casa de Nazaret que visitó el Arcángel Gabriel en la Anunciación a la Santísima Virgen María. Es allí donde el Verbo se hizo Carne y habitó entre nosotros. Allí también vivió la Sagrada Familia a su regreso de Egipto y donde Jesús pasó 30 de sus 33 años junto a La Virgen y San José.

Pronto La Santa Casa se convirtió en lugar de reunión para la celebración de la Santa Misa de los primeros Cristianos. Podemos imaginarnos con qué amor y veneración cuidaban este Santo Lugar.

Actualmente la Santa Casa está situada dentro de la Basílica que para ella se construyó en Loreto, Italia. Dentro de la casa de Loreto se venera la pequeña estatua de La Virgen de Loreto. La Santa Casa en Nazaret tenía dos partes: una parte era una pequeña gruta y la segunda parte una pequeña estructura de ladrillos que se extendía desde la entrada de la gruta. La estructura de ladrillos no tenía sino tres paredes, ya que un lado pegaba con la pared de la gruta.

¿Cómo llegó la casa de Nazaret a Loreto, Italia? Hay varias tradiciones. Una de ellas habla de ángeles que transportaron la casa por los aires. Pero hay documentos que parecen indicar que el responsable del traslado es un comerciante llamado Nicéforo Angelo del siglo XIII. Quizás su apellido inspiró la idea del traslado por medio de ángeles. En todo caso, tan extraordinaria empresa, sin duda, tuvo la protección y guía del cielo. Ya lo había dicho el ángel a la Virgen en esa misma casa: "Para Dios nada es imposible". 



Tratan de destruir la Santa Casa

La casa de Loreto es sagrada en virtud de quienes en ella habitaron. Muchos consideran la Santa Casa de Loreto como uno de los lugares más sagrados del mundo y Dios no quiso que esta casa fuese profanada o destruida, sino preservada para siempre. El demonio, los hombres, y el mundo usualmente van contra todo lo que Dios quiere y con esta bendita casa no fue diferente. En 1291, los Sarracenos conquistaban la Tierra Santa. Quisieron acabar con toda la historia del cristianismo y la mejor forma para ellos era destruyendo todos los lugares sagrados. Pensaban que eliminando todos los signos visibles del cristianismo, apagarían el amor y la devoción.

Fueron en busca de cada lugar venerado por su asociación con la vida de Cristo. Cuando llegaron a las proximidades de Nazaret, La Santa Casa no tenía defensa humana. Esta era bien conocida, porque los cristianos desde el tiempo de los Apóstoles la tenían con gran reverencia y celebraban allí la Santa Misa. Los enemigos se decían: "Nunca más los cristianos celebrarán aquí la Anunciación"

La Basílica construida sobre la Santa Casa ya había sido destruida dos veces antes. La primera vez fue en 1090 A.D. Sin embargo, la casa quedaba intacta. Los cruzados reconstruyeron la Basílica, pero en 1263 fue destruida de nuevo. Una vez más la Santa Casa fue protegida. Esta vez los cruzados no pudieron reconstruir la Basílica y la Santa Casa se quedó sin protección.

La tradición del traslado Angelical

Según esta tradición, en 1291, cuando los cruzados perdían control sobre la Tierra Santa, Nuestro Señor decidió enviar a los ángeles a proteger su Santa Casa y les dio el mandato de que movieran la casa a un lugar seguro. Llévense la Santa Casa a un lugar seguro, lejos del odio de mis enemigos de esta tierra donde nací. Elévenla sobre los aires, donde no la puedan alcanzar. Que no la vean.

El 12 de mayo de 1291 los ángeles trasladaron la casa hasta un pequeño poblado llamado Tersatto, en Croacia. Muy temprano en la mañana la descubrieron los vecinos y se asombraron al ver esta Casa sin cimiento y no se explicaban cómo llegó ahí. Se adentraron y vieron un altar de piedra. En el altar había una estatua de cedro de la Virgen María, que tenía al niño Jesús en sus brazos. El niño Jesús tenía sus dos dedos de la mano derecha extendido como bendiciendo. Con su mano izquierda sostenía una esfera de oro representando al mundo. Ambos estaban vestidos como con unas batas y tenían coronas de oro.

Unos días más tarde, la Virgen María se le apareció a un sacerdote de ese lugar y le explicó de dónde venía la casa. Ella dijo: "Debes saber que la casa que recientemente fue traída a tu tierra es la misma casa en la cual yo nací y crecí. Aquí, en la Anunciación del Arcángel Gabriel, yo concebí al Creador de todas las cosas. Aquí, el Verbo se hizo carne. El altar que fue trasladado con la casa fue consagrado por Pedro, el Príncipe de los Apóstoles. Esta casa ha venido de Nazaret a tu tierra por el poder de Dios, para el cual nada es imposible.

Ahora, para que tú puedas dar testimonio de todo esto, sé sanado. Tu curación inesperada y repentina confirmará la verdad que yo te he declarado hoy." El sacerdote, que había estado enfermo por mucho tiempo, se sanó inmediatamente y anunció al pueblo el milagro que había ocurrido. Comenzaron las peregrinaciones a la Santa Casa. Los residentes de este pequeño pueblo construyeron sobre la Santa Casa un edificio sencillo para protegerla de los elementos de la naturaleza. Pero la alegría de los croatas duró poco tiempo. Después de tres años y cinco meses de estar la casa en este poblado, en la noche del 10 de diciembre, de 1294, la casa desapareció de Tersatto para nunca más volver.

Un residente devoto de Tersatto construyó una pequeña iglesia en el lugar donde estuvo la casa, una réplica de esta. Y puso la siguiente inscripción: ¨La Santa Casa de la Virgen María vino de Nazaret el 10 de diciembre de 1291 y estuvo hasta el 10 de diciembre de 1294.¨La gente de Croacia continuó venerando a Nuestra Señora en la réplica de la Santa Casa. Fue tanta su devoción, que el Papa Urbano V envió a la gente de Tersatto una imagen de Nuestra Señora en 1367. Esta imagen se cree fue esculpida por San Lucas.

La Santa Casa es llevada a Italia

El 10 de diciembre de 1294, unos pastores de la región de Loreto en Italia reportaron que habían visto una casa volando sobre el mar, sostenida por ángeles. Había un ángel vestido con una capa roja (San Miguel) que dirigía a los otros y la Virgen María con el Niño Jesús estaban sentados sobre la casa. Los ángeles bajaron la casa en un lugar llamado Banderuola.

Muchos llegaban a visitar esta santa casa, pero también habían algunos que llegaban para asaltar a los peregrinos. Por esta razón las personas dejaron de llegar y la casa nuevamente fue trasladada por los ángeles a un cerro en medio de una finca. La Santa Casa no se quedaría aquí por mucho tiempo. La finca era de dos hermanos que comenzaron a discutir sobre quién era el dueño de la casa. Por tercera vez la casa es trasladada a otro cerro y la colocaron en el medio del camino. Ese es el lugar que ha ocupado ya por 700 años.

Los habitantes de Recanati y Loreto verdaderamente no sabían la historia de la Santa Casa, solo sabían de los milagros que se acontecían ahí. Dos años más tarde, la Virgen María se le apareció a un ermitaño llamado Pablo y le contó el origen y la historia de la Santa Casa: “Se mantuvo en la ciudad de Nazaret hasta que por el permiso de Dios, aquellos que honraban esta casa fueron expulsados por los enemigos. Ya que no se le honraba y estaba en peligro de ser profanada, mi Hijo quiso trasladarla de Nazaret a Yugoslavia y de ahí hasta tu tierra”. Pablo entonces se lo contó a las personas del pueblo y comenzaron a hacer gestiones para verificar la autenticidad de la casa. Fueron primero a Tersatto y luego a Nazaret.

Investigaciones de los expertos

Los expertos asignados a este proyecto fueron a Tersatto. Ahí les verificaron que las paredes eran de color rojizo y cerca de 16¨ de ancho. Descubrieron también que la replica medía exactamente igual que la de Loreto, 31 ¼ pies de largo por 13 pies y 4 pulgadas de ancho por 28 pies de alto. Tenía una sola puerta de 7 pies de alto y 4 1/2 de ancho. Tenía también una ventana. Todas las descripciones, incluso las de los elementos interiores y las estatuas, coincidían.

En Nazaret: descubrieron que de verdad era la casa de la Virgen. Las medidas de la fundación eran exactas a las de Loreto y la maqueta construida en Tersatto. Después de 6 meses regresaron a Loreto y declararon la autenticidad de la Santa Casa. Años más tarde, encontraron monedas debajo de la casa, no solo del área de Nazaret, sino que del período en que la casa estuvo en Nazaret. Las piedras y la tierra utilizada para el relleno de la casa era idéntica a las que se usaban en Nazaret en ese tiempo y civilización. La casa no tiene cimientos, ya que estos se quedaron en Nazaret.

Anécdotas de la Santa Casa de Loreto

Llegó un tiempo en que muchos peregrinos iban a este santuario y el Papa Clemente VII mandó que se cerrara la puerta original y se construyeran tres puertas, ya que solo había un puerta y las personas se peleaban para entrar y salir. Solo había un problema y era que nadie le había pedido permiso a la Virgen María para las alteraciones. Cuando el arquitecto cogió su martillo para comenzar, su mano se marchitó y comenzó a temblar. Enseguida se fue de Loreto y nadie más quiso hacer el trabajo. Tiempo después un clérigo llamado Ventura Barino aceptó hacer el trabajo, pero primero se arrodilló y rezó a la Virgen. Este le dijo que no era su culpa, sino la orden del Papa, que si ella estaba enojada que lo tomara contra el Papa y no contra él¨. El clérigo pudo completar el trabajo. Las personas de Loreto también decidieron proteger la Santa Casa poniéndole una pared de ladrillo, pero después que terminaron con la pared, la pared se separó de la casa. Por eso hay un espacio entre la Santa Casa y la pared que fue construida.

Devolverle a la Virgen lo que es de Ella

Una historia relata que el Obispo de Portugal visitó la Santa Casa y quiso llevarse una piedra para construir una Iglesia en honor a la Virgen de Loreto. El Papa le dio permiso y el Obispo mandó a su secretario a sacar la piedra y llevársela. El Obispo se enfermó de repente y cuando llegó su secretario casi estaba muerto. El Obispo les pidió a algunas hermanas religiosas que rezaran por él y algunos días después recibió este mensaje: "Nuestra Señora dice, si el Obispo desea recuperarse, debe devolver a la Virgen lo que él se ha llevado". El secretario y el Obispo se asombraron de esto, pues nadie sabía lo de la piedra de la Santa Casa. El secretario se fue inmediatamente de regreso a Loreto con la piedra y cuando llegó, el Obispo estaba completamente sanado. Por esta razón, durante los siglos, los Papas han prohibido, bajo amenaza de excomunión, la extracción de cualquier parte de la Santa Casa.

Un Lugar Sagrado

La Santa Casa es considerada entre los lugares más sagrados del mundo. Antes de que la Santa Casa fuese trasladada, San Francisco de Asís había profetizado que un día Loreto se iba a llamar el lugar más sagrado del mundo y que por ello debían abrir una casa allí.

Muchos santos, beatos y Papas han visitado esta casa. Entre ellos: San Francisco de Sales: hizo sus votos de celibato en la Santa Casa; Santa Teresa de Lisieux: antes de ir a pedir permiso al Papa para entrar al Carmelo a la edad de 15 años, visitó la Santa Casa; San Maximiliano Kolbe: en su regreso a la ciudad de la Inmaculada, poco antes de ser llevado al campo de concentración; y muchísimos otros santos.

El Papa Juan XXIII fue el día antes de convocar el Concilio Vaticano II y pidió a la Virgen de Loreto la protección del Concilio. Juan Pablo II ha visitado muchas veces la Casa de Loreto y ha tenido allí convenciones de jóvenes y familias.

Muchos peregrinos van cada año a visitar a la Santa Casa. A visitar el lugar donde la Sagrada Familia vivió y a recibir las gracias que Dios les quiere dar. Es una tradición rezar de rodillas el Santo Rosario alrededor de la Casa. Es un rosario penitencial pidiendo la intercesión poderosa de la Stma. Virgen. Procesiones con velas del Santísimo Sacramento forman parte de las celebraciones en la Basílica de la Santa Casa de Loreto.

La imagen de Nuestra Sra. de Loreto, se encuentra en el interior de la Casa, tiene una la túnica tradicional decorativa. El color oscuro de la imagen representa a la estatua original de madera, que con los siglos se oscureció con el hollín de las lámparas del aceite que se usaba en la capilla. En 1921 se destruyó la estatua original en un incendio, y otra similar fue colocada en el lugar.

8 de diciembre de 2011

A LA INMACULADA CONCEPCION , Lope de Vega

Inmmaculada, titular de su Parroquia de Caravaca ,Foto Joaquin Amor

La Niña a quien dijo el Ángel
que estaba de gracia llena,
cuando de ser de Dios madre
le trujo tan altas nuevas,


ya le mira en un pesebre,
llorando lágrimas tiernas,
que obligándose a ser hombre,
también se obliga a sus penas.


¿Qué tenéis, dulce Jesús?,
le dice la Niña bella;
¿tan presto sentís mis ojos
el dolor de mi pobreza?


Yo no tengo otros palacios
en que recibiros pueda,
sino mis brazos y pechos,
que os regalan y sustentan.


No puedo más, amor mío,
porque si yo más pudiera,
vos sabéis que vuestros cielos
envidiaran mi riqueza.


El niño recién nacido
no mueve la pura lengua,
aunque es la sabiduría
de su eterno Padre inmensa.


Mas revelándole al alma
de la Virgen la respuesta,
cubrió de sueño en sus brazos
blandamente sus estrellas.

5 de diciembre de 2011

A LA INMACULADA CONCEPCIÓN DE MARIA

Purisima de Velez Rubio, obra de Fernandez Caro, caravaqueño


¡Oh quién el arpa de David pulsara!
¡Oh quién tuviera tanta melodía,
Que en cánticos augustos celebrara
El gozo santo, la virtud preclara
Que infunde tu mirar, dulce MARIA!
Tú me miras, hermosa Virgen pura,
Tú me miras y lees mi pensamiento:
Tu imagen vive en mi corazón con su hermosura,
Y animado de mística ternura
Vierte miel en mi pecho, de contento.
Madre piadosa y Reina de profetas,
Torre de David, espejo de justicia:
Por ti giran del templo las veletas,
Por ti llevan los sabios sus mucetas,
Por ti se colma el mundo de delicias.
Por ti, sagrada arca de alianza,
Puerta del  cielo, pozo de las ciencias,
Perdón el pecador culpable alcanza;
Tú eres su refugio y su esperanza;
Tú el remedio de todas las conciencias.
Salud de enfermos, causa de alegría
Virgen de concepción pero sin mancha;
Eres Virgen de Israel MARIA,
Eres luna de noche y sol de día
Y quien el orco estrecha, el cielo ensancha.
¡Ay! deja que entregado á los delirios
De ilimitado amor llegue á tus plantas,
Por más que apague la impiedad tus cirios,
Por más que arranque de tu altar los lirios,
Que colocaran mil ofertas santas.
En este siglo de fatal ventura,
De aberraciones de mentida ciencia,
Do licenciosa mundanal locura,
Yo te consagro votos de fe pura,
De cristiana adhesión, fina creencia.
Yo seré siempre, ó Virgen nazarena,
El creyente del campo solitario;
El que te adore por de gracia llena,
Pisando flores ó desierta arena,
Lejos de un mundo infiel, tumultuario.
Yo seré sin ficciosa hipocresía
Tu humilde siervo y tierno anacoreta,
Y al solo dulce nombre de MARIA
Podré probar con alta melodía,
Que es el nombre más dulce del poeta.
DOMINGO DIAZ DE ROBLES.



27 de noviembre de 2011

Santa Catalina Labouré y la Virgen Milagrosa

Las apariciones
El 1830 es un año clave: tiene lugar en París la primera aparición moderna de la Virgen Santísima. Comienza lo que Pío XII llamó la "era de María", una etapa de repetidas visitaciones celestiales. Entre otras: La Salette, Lourdes, Fátima ... Y como en su visita a Santa Isabel, siempre viene para traernos gracia, para acercarnos a Jesús, el fruto bendito de su vientre. También para recordarnos el camino de salvación y advertirnos las consecuencias de optar por otros caminos.
Sta. Catalina Labouré
Catalina nació el 2 de mayo de 1806, en Fain-les-Moutiers, Borgoña ( Francia ). Entró a la vida religiosa con la Hijas de la Caridad el 22 de enero de 1830 y después de tres meses de postulantado, 21 de abril, fue trasladada al noviciado de París, en la Rue du Bac, 140.
El Corazón de San Vicente
La novicia estaba presente cuando trasladaron los restos de su fundador, San Vicente de Paul, a la nueva iglesia de los Padres Paules a solo unas cuadras de su noviciado. El brazo derecho del santo fue a la capilla del noviciado.  En esta capilla, durante la novena, Catalina vio el corazón de San Vicente en varios colores.  De color blanco, significando la unión que debía existir entres las congregaciones fundadas por San Vicente. De color rojo, significando el fervor y la propagación que habían de tener dichas congregaciones. De color rojo oscuro, significando la tristeza por el sufrimiento que ella padecería. Oyó interiormente una voz: " el corazón de San Vicente está profundamente afligido por los males que van a venir sobre Francia ".  La misma voz añadió un poco mas tarde: " El corazón de San Vicente está mas consolado por haber obtenido de Dios, a través de la intercesión de la Santísima Virgen María, el que ninguna de las dos congregaciones perezca en medio de estas desgracias, sino que Dios hará uso de ellas para reanimar la fe ".
Visiones del Señor en la Eucaristía
Durante los 9 meses de su noviciado en la Rue du Bac, sor Catalina tuvo también la gracia especial de ver todos los días al Señor en el Santísimo Sacramento.
El domingo de la Santísima Trinidad, 6 de junio de 1830, el Señor se mostró durante el evangelio de la misa como un Rey, con una cruz en el pecho. De pronto, los ornamentos reales de Jesús cayeron por tierra, lo mismo que la cruz, como unos despojos desperdiciables. "Inmediatamente - escribió sor Catalina - tuve las ideas mas negras y terribles: que el Rey de la tierra estaba perdido y sería despojado de sus vestiduras reales. Sí, se acercaban cosa malas ".
Virgen MilagrosaCatalina sueña con ver a la Virgen
El domingo 18 de Julio 1930, víspera de la fiesta de San Vicente de Paúl, La maestra de novicias les había hablado sobre la devoción a los santos, y en particular a la Reina de todos ellos, María Santísima. Sus palabras, impregnadas de fe y de una ardiente piedad, avivaron en el corazón de Sor Laboure el deseo de ver y de contemplar el rostro de la Santísima Virgen. Como era víspera de San Vicente, les habían distribuido a cada una un pedacito de lienzo de un roquete del santo. Catalina se lo tragó y se durmió pensando que S. Vicente, junto con su ángel de la guarda, le obtendrían esa misma noche la gracia de ver a la Virgen como era su deseo. Precisamente, los anteriores favores recibidos en las diversas apariciones de San Vicente a Sor Catalina alimentaban en su corazón una confianza sin limites hacia su bienaventurado padre, y su candor y viva esperanza no la engañaron. "La confianza consigue todo cuanto espera" (San Juan de la Cruz).
El Angel la despierta
Todo era silencio en la sala donde dormía Sor Catalina y cerca de las 11:30 PM oyó que por tres veces la llamaban por su nombre. Se despertó y apartando un poco las cortinas de su cama miro del lado que venia la voz y vio entonces un niño vestido de blanco, que parecía tener como cuatro o cinco años, y el cual le dijo: "Levántate pronto y ven a la capilla; la Santísima Virgen te espera".
Sor Catalina vacila; teme ser notada de las otras novicias; pero el niño responde a su preocupación interior y le dice: "No temas; son las 11;30 p.m.; todas duermen muy bien. Ven yo te aguardo".
Ella no se detiene ya ni un momento; se viste con presteza y se pone a disposición de su misterioso guía, "que permanecía en pie sin separarse de la columna de su lecho."
Vestida Sor Catalina, el niño comienza a andar, y ella lo sigue marchando a "su lado izquierdo". Por donde quiera que pasaban las luces se encendían. El cuerpo del niño irradiaba vivos resplandores y a su paso todo quedaba iluminado.
Al llegar a la puerta de la capilla la encuentra cerrada; pero el niño toca la puerta con su dedito y aquella se abrió al instante.
Dice Catalina: "Mi sorpresa fue mas completa cuando, al entrar a la capilla, vi encendidas todas las velas y los cirios, lo que me recordaba la Misa de media noche". (todavía ella no ve a la Virgen)
El niño la llevó al presbiterio, junto al sillón destinado al P. Director, donde solía predicar a las Hijas de la Caridad, y allí se puso de rodillas, y el niño permaneció de pie todo el tiempo al lado derecho.
La espera le pareció muy larga, ya que con ansia deseaba ver a la Virgen. Miraba ella con cierta inquietud hacia la tribuna derecha, por si las hermanas de vela, que solían detenerse para hacer un acto e adoración, la veían.
Por fin llego la hora deseada, y el niño le dijo: "Ved aquí a la Virgen, vedla aquí"
Sor Catalina oyó como un rumor, como el roce de un traje de seda, que partía del lado de la tribuna, junto al cuadro de San José. Vio que una señora de extremada belleza, atravesaba majestuosamente el presbiterio, "fue a sentarse en un sillón sobre las gradas del altar mayor, al lado del Evangelio".
Aparición de la VirgenSor Catalina en el fondo de su corazón dudaba si verdaderamente estaba o no en presencia de la Reina de los Cielos, pero el niño le dijo: "Mira a la Virgen".
Le era casi imposible describir lo que experimentaba en aquel instante, lo que paso dentro de ella, y le parecía que no veía a la Santísima Virgen.
Entonces el niño le habló, no como niño, sino como el hombre mas enérgico y palabras muy fuertes: -"¿Por ventura no puede la Reina de los Cielos aparecerse a una pobre criatura mortal en la forma que mas le agrade?" "
Entonces, mirando a la Virgen, me puse en un instante a su lado, me arrodille en el presbiterio, con las manos apoyadas en las rodillas de la Santísima Virgen. "Allí pasé los momentos más dulces de mi vida; me sería imposible decir lo que sentí".
Ella me dijo cómo debía portarme con mi director, la manera de comportarme en las penas y acudir (mostrándome con la mano izquierda) a arrojarme al pie del altar y desahogar allí mi corazón, pues allí recibiría todos los consuelos de que tuviera necesidad. Entonces le pregunté que significaban las cosa que yo había visto, y ella me lo explicó todo ".
Instrucciones de la Santísima Virgen
Fueron muchas las confidencias que Sor Catalina recibió de los labios de María Santísima, pero jamas podremos conocerlas todas, porque respecto a algunas de ellas, le fue impuesto el mas absoluto secreto.
La Virgen le dio algunos consejos para su particular provecho espiritual: (La Virgen es Madre y Maestra)
1- Como debía comportarse con su director (humildad profunda y obediencia). Esto a pesar de que su confesor, el padre Juan María Aladel, no creyó sus visiones y le dijo que las olvidara.
2- La manera de comportarse en las penas, (paciencia, mansedumbre, gozo)
3- Acudir siempre (mostrándole con la mano izquierda) a arrojarse al pie del altar y desahogar su corazón, pues allí recibiría todos los consuelos de que tuviese necesidad. (corazón indiviso, no consuelos humanos)
La Virgen también le explicó el significado de todas las apariciones y revelaciones que había tenido de San. Vicente y del Señor.
Luego continuó diciéndole:
Dios quiere confiarte una misión; te costara trabajo, pero lo vencerás pensando que lo haces para la gloria de Dios. Tu conocerás cuan bueno es Dios. Tendrás que sufrir hasta que los digas a tu director. No te faltaran contradicciones; mas te asistirá la gracia; no temas. Háblale a tu director con confianza y sencillez; ten confianza no temas. Veras ciertas cosas; díselas. Recibirás inspiraciones en la oración.
Los tiempos son muy calamitosos. Han de llover desgracias sobre Francia. El trono será derribado. El mundo entero se verá afligido por calamidades de todas clases (al decir esto la Virgen estaba muy triste). Venid a los pies de este altar, donde se prodigaran gracias a todos los que las pidan con fervor; a todos, grandes y pequeños, ricos y pobres.
Deseo derramar gracias sobre tu comunidad; lo deseo ardientemente. Me causa dolor el que haya grandes abusos en la observancia, el que no se cumplan las reglas, el que haya tanta relajación en ambas comunidades a pesar de que hay almas grandes en ellas. Díselo al que esta encargado de ti, aunque no sea el superior. Pronto será puesto al frente de la comunidad. El deberá hacer cuanto pueda para restablecer el vigor de la regla. Cuando esto suceda otra comunidad se unirá a las de ustedes.
Vendrá un momento en que el peligro será grande; se creerá todo perdido; entonces yo estaré contigo, ten confianza. Reconocerás mi visita y la protección de Dios y de San Vicente sobre las dos comunidades..
Mas no será lo mismo en otras comunidades, en ellas habrá víctimas..(lagrimas en los ojos). El clero de París tendrá muchas víctimas..Morirá el señor Arzobispo.
Hija mía, será despreciada la cruz, y el Corazón de mi Hijo será otra vez traspasado; correrá la sangra por las calles ( la Virgen no podía hablar del dolor, las palabras se anudaban en su garganta; semblante pálido). El mundo entero se entristecerá . Ella piensa: ¿cuando ocurrirá esto? y una voz interior asegura: cuarenta años y diez y después la paz.
La Virgen, después de estar con ella unas dos horas, desaparece de la vista de Sor Catalina como una sombra que se desvanece.
En esta aparición la Virgen:



  • Le comunica una misión que Dios le quiere confiar.





  • La prepara con sabios consejos para que hable con sumisión y confianza a su director.





  • Le anuncia futuros eventos para afianzar la fe de aquellos que pudieran dudar de la aparición.





  • Le Regala una relación familiar de madre-hija: la ve, se acerca a ella, hablan con familiaridad y sencillez, la toca y la Virgen no solo consiente, sino que se sienta para que Catalina pueda aproximarse hasta el extremo de apoyar sus brazos y manos en las rodillas de la Reina del Cielo.




  • Todas las profecías se cumplieron:1-la misión de Dios pronto le fue indicada con la revelación de la medalla milagrosa.
    2-una semana después de esta aparición estallaba la revolución. Los revoltosos ocupaban las calles de París, saqueos, asesinatos, y finalmente era destronado Carlos X, sustituido por el "rey ciudadano" Luis Felipe I, gran maestro de la masonería.
    3-El P. Aladel (director) es nombrado en 1846 Director de las Hijas de la Caridad, establece la observancia de la regla y hacia la década del 60 otra comunidad femenina se une a las Hijas de la Caridad.
    4-En 1870 (a los 40 años) llegó el momento del gran peligro, con los horrores de la Comuna y el fusilamiento del Arzobispo Mons. Darboy y otros muchos sacerdotes.
    5- solo queda por cumplir la ultima parte.
    Aparición del 27 de noviembre del 1830
    La tarde el 27 de Nov. de 1830, sábado víspera del primer domingo de Adviento, en la capilla, estaba Sor Catalina haciendo su meditación, cuando le pareció oír el roce de un traje de seda que le hace recordar la aparición anterior.
    Aparece la Virgen Santísima, vestida de blanco con mangas largas y túnica cerrada hasta el cuello. Cubría su cabeza un velo blanco que sin ocultar su figura caía por ambos lados hasta los pies. Cuando quiso describir su rostro solo acertó a decir que era la Virgen María en su mayor belleza.
    Sus pies posaban sobre un globo blanco, del que únicamente se veía la parte superior, y aplastaban una serpiente verde con pintas amarillas. Sus manos elevadas a la altura del corazón sostenían otro globo pequeño de oro, coronado por una crucecita.
    La Stma. Virgen mantenía una actitud suplicante, como ofreciendo el globo. A veces miraba al cielo y a veces a la tierra. De pronto sus dedos se llenaron de anillos adornados con piedras preciosas que brillaban y derramaban su luz en todas direcciones, circundándola en este momento de tal claridad, que no era posible verla.
    Tenia tres anillos en cada dedo; el mas grueso junto a la mano; uno de tamaño mediano en el medio, y no mas pequeño, en la extremidad. De las piedras preciosas de los anillos salían los rayos, que se alargaban hacia abajo; llenaban toda la parte baja.
    Mientras Sor Catalina contemplaba a la Virgen, ella la miró y dijo a su corazón:
    Este globo que ves (a los pies de la Virgen) representa al mundo entero, especialmente Francia y a cada alma en particular. Estos rayos simbolizan las gracias que yo derramo sobre los que las piden. Las perlas que no emiten rayos son las gracias de las almas que no piden.
    Con estas palabras La Virgen se da a conocer como la mediadora de las gracias que nos vienen de Jesucristo.
    El globo de oro (la riqueza de gracias) se desvaneció de entre las manos de la Virgen. Sus brazos se extendieron abiertos, mientras los rayos de luz seguían cayendo sobre el globo blanco de sus pies.
    medalla milagrosaLa Medalla Milagrosa:
    En este momento se apareció una forma ovalada en torno a la Virgen y en el borde interior apareció escrita la siguiente invocación: "María sin pecado concebida, ruega por nosotros, que acudimos a ti"
    Estas palabras formaban un semicírculo que comenzaba a la altura de la mano derecha, pasaba por encima de la cabeza de la Santísima Virgen, terminando a la altura de la mano izquierda .
    Oyó de nuevo la voz en su interior: "Haz que se acuñe una medalla según este modelo. Todos cuantos la lleven puesta recibirán grandes gracias. Las gracias serán mas abundantes para los que la lleven con confianza".
    La aparición, entonces, dio media vuelta y quedo formado en el mismo lugar el reverso de la medalla.
    En el aparecía una M, sobre la cual había una cruz descansando sobre una barra, la cual atravesaba la letra hasta un tercio de su altura, y debajo los corazones de Jesús y de María, de los cuales el primero estaba circundado de una corona de espinas, y el segundo traspasado por una espada. En torno había doce estrellas.
    La misma aparición se repitió, con las mismas circunstancias, hacia el fin de diciembre de 1830 y a principios de enero de 1831. La Virgen dijo a Catalina: "En adelante, ya no veras , hija mía; pero oirás mi voz en la oración".
    Un día que Sor Catalina estaba inquieta por no saber que inscripción poner en el reverso de la medalla, durante la oración, la Virgen le dijo: "La M y los dos corazones son bastante elocuentes".
    Símbolos de la Medalla y mensaje espiritual:
    En el Anverso:
    -María aplastando la cabeza de la serpiente que esta sobre el mundo. Ella, la Inmaculada, tiene todo poder en virtud de su gracia para triunfar sobre Satanás.
    -El color de su vestuario y las doce estrellas sobre su cabeza: la mujer del Apocalipsis, vestida del sol.
    -Sus manos extendidas, transmitiendo rayos de gracia, señal de su misión de madre y mediadora de las gracias que derrama sobre el mundo y a quienes pidan.
    -Jaculatoria: dogma de la Inmaculada Concepción (antes de la definición dogmática de 1854). Misión de intercesión, confiar y recurrir a la Madre.
    -El globo bajo sus pies: Reina del cielos y tierra.
    -El globo en sus manos: el mundo ofrecido a Jesús por sus manos.
    En el reverso:
    -La cruz: el misterio de redención- precio que pagó Cristo. obediencia, sacrificio, entrega
    -La M: símbolo de María y de su maternidad espiritual.
    -La barra: es una letra del alfabeto griego, "yota" o I, que es monograma del nombre, Jesús.
    Agrupados ellos: La Madre de Jesucristo Crucificado, el Salvador.
    -Las doce estrellas: signo de la Iglesia que Cristo funda sobre los apóstoles y que nace en el Calvario de su corazón traspasado.
    -Los dos corazones: la corredención. Unidad indisoluble. Futura devoción a los dos y su reinado.
    Nombre:
    La Medalla se llamaba originalmente: "de la Inmaculada Concepción", pero al expandirse la devoción y haber tantos milagros concedidos a través de ella, se le llamó popularmente "La Medalla Milagrosa".
    sacado de WWW.corazones.org

    22 de noviembre de 2011

    Antonio Praena O. P. Premio de Poesía;

    La Orden de Santo Domingo, de la cual nos sentimos parte, además de dar grandes teólogos a la historia de la Iglesia, también ha dado grandes poetas, el galardonado es Dominico, y director espiritual de la Archicofradía del Rosario de Granada, recogemos esta noticia de la pagina de Ser;

     

    Antonio Praena, XXII Premio Nacional de Poesía José Hierro de Sanse

    Con la obra “Actos de amor” y con la unanimidad del jurado, el escritor granadino ha sido el ganador de esta nueva edición, en la que se han presentado cerca de 250 trabajos. El premio es de 15.000 euros.

    Antonio Praena, XXII Premio Nacional de Poesía José Hierro de Sanse
    Antonio Praena, XXII Premio Nacional de Poesía José Hierro de Sanse
    Nacido en Parullena en 1973, Antonio Praena es profesor agregado de la Facultad de Teología de Valencia, prior del convento de Santa Cruz de la Real de Granada, licenciado en Teología Dogmática y amante de la escritura, una virtud que le ha otorgado numerosos premios. Ahora, en su haber, con la obra “Actos de amor”, Antonio Praena ha conseguido el XXII Premio Nacional de Poesía José Hierro de San Sebastián de los Reyes.
    En esta edición, el jurado del prestigioso galardón lo formaban Ángel González, Luisa Castro, Joaquín Benito de Lucas, Pureza Canelo, Antonio Hernández y Pablo García Baena. El martes 13 de diciembre se celebra el acto oficial de un premio dotado con 15.000 euros y que supone la publicación de la obra en la Colección Universidad Popular José Hierro.

    Ya era hora de que escucháramos esta noticia

     A ver si ya las iglesias se van pareciendo mas a un recinto sacro que a una nave del espacio sideral; después de ver tanto despropósito, tanta estética alejada de lo sagrado que no invita a la oración ni al recogimiento, ni al aspecto catolico, después de tanto atentado terrorista contra el buen gusto, esta noticia aparecida en Infocatólica;

    Una comisión vaticana para vigilar la construcción de las nuevas iglesias

    En las próximas semanas, será creada, dentro de la Congregación del Culto Divino, una «Comisión de arte y música sacra para la liturgia». Un equipo para decir «alto» a las iglesias-garage, a las arquitecturas atrevidas que llegan a desnaturalizar muchos modernos espacios de culto católicos. Y para promover un canto que ayude verdaderamente a la celebración de la misa. Según indica Andrea Tornielli en Vatican Insider, la Congregación para el culto pretende promover un trabajo de formación en el «ars celebrandi» desde abajo, que involucre a sacerdotes, religiosos y catequistas

     No se trata de una simple oficina, sino de un verdadero equipo, que tendrá la tarea de colaborar con las comisiones encargadas de valorar los proyectos de las nuevas iglesias en las diócesis, así como de profundizar sobre el tema de la música y el canto que acompañan la celebración.
    El cardenal Antonio Cañizares Llovera, Prefecto de Culto Divino, de acuerdo con Benedicto XVI, considera este trabajo como «muy urgente». La realidad es evidente: en los últimos años, las iglesias han sido sustituidas por construcciones que parecen más salones multiuso que iglesias. Y muy a menudo, los arquitectos, incluso los más famosos, no parten de lo que es la liturgia católica para llevar a cabo sus proyectos y terminan haciendo construcciones de vanguardia que se parecen a todo menos a una iglesia.
    Cubos de cemento, cajas de vidrio, formas azarosas, espacios confusos en los que, una vez dentro, se percibe todo menos el sentido de lo sacro y del misterio, en donde el Sagrario está medio escondido y a veces hay que buscarlo como si fuera un tesoro, o en donde las imágenes sagradas casi no tienen lugar. La nueva comisión, cuyo reglamento será redactado en estos días, dará indicaciones precisas a las diócesis, ocupándose solo del arte para la liturgia, no del arte sacro en general, así como de la música y del canto para la liturgia. Contará con los poderes jurídicos de la Congregación para el Culto Divino.
    Como es sabido, el pasado 27 de septiembre, Benedicto XVI, con el motu proprio «Quaerit semper», transfirió a la Rota Romana, el tribunal de la Santa Sede, la competencia sobre dos materias de las que hasta entonces se ocupaba la Congregación para el Cculto. La primera de ellas tiene que ver con la nulidad de la ordenación sacerdotal que, como sucede para el matrimonio, por causa de vicios de materia o de forma, de consenso o de intención, tanto por parte del obispo que ordena como del clérigo que es ordenado. La segunda materia es la dispensa en los casos de matrimonios contraídos pero no consumados. Tareas que ocupaban bastante al dicasterio de Cañizares.
    En el motu proprio, el Papa explicaba que: «En las circunstancias actuales, ha parecido conveniente que la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos se dedique principalmente a dar nuevo impulso a la promoción de la Sagrada Liturgia en la Iglesia, según la renovación querida por el Concilio Vaticano II a partir de la Constitución Sacrosanctum Concilium».

    Reforma de la reforma

    El dicasterio debe, pues, dedicarse «a dar nuevo impulso a la promoción de la Sagrada Liturgia en la Iglesia», sobre todo con el ejemplo. Desde este punto de vista, con respecto a los proyectos iniciales, parece irse alejando cada vez más la idea de una «reforma de la reforma» litúrgica (expresión que usó el mismo Ratzinger cuando era cardenal), y prevalece, en cambio, un proyecto de amplias dimensiones que, sin proponer la introducción de modificar en la misa, se ocupe de favorecer el «ars celebrandi» y la fidelidad a los dictámenes y a las instituciones del nuevo misal.
    Vale la pena, de hecho, recordar que los abusos litúrgicos, que se han verificado en las últimas décadas y que, en cierto sentido, se han convertido en una práctica común, se llevan a cabo en disonancia con las normas establecidas por la reforma litúrgica de Pablo VI. Así, no es la reforma lo que hay que retocar, sino que hay que profundizar y en algunos casos recuperar el significado de la liturgia bien celebrada. Por ello, la Congregación para el culto pretende promover un trabajo de formación desde abajo, que involucre a los sacerdotes, religiosos y catequistas. Siguiendo el ejemplo y el magisterio de Benedicto XVI, tendría que favorecer la recuperación del sentido de lo sagrado y del misterio en la liturgia.
    Algunos textos litúrgicos hay que revisarlos, porque están viejos, como el caso del ritual de la penitencia publicado en 1974: durante los años que siguieron llegaron una instrucción apostólica, un motu proprio, el nuevo Código de Derecho Canónico y el nuevo Catecismo. Una actualización, en este y en otros casos, habrá que llevarla a cabo.
    La idea en la que estaba trabajando el cardenal Cañizares es la de reafirmar el primado de la gracia sobre la acción humana, de la necesidad de hacerle espacio a la acción de Dios en la liturgia con respecto al que se le da a la creatividad del hombre. Las ocasiones para reflexionar sobre estos temas serán muchas. El año próximo, 2012, se cumplen los 50 años del Concilio Vaticano II y el sucesivo se celebrarán los 50 años del primer texto conciliar aprobado: la constitución de la liturgia, Sacrosanctum Concilium.
    Infocatolica 22-11-11

    14 de noviembre de 2011

    SAN LORENZO DE BRINDISI Y LA VIRGEN MARIA


    Teólogo Doctor de la Iglesia y Apóstol de la Santísima Virgen, San Lorenzo de Bríndisi la coloca muy al lado de su divino Hijo, en el primer lugar después de El, en el plan de la predestinación. Al Verbo Encarnado le debe Ella, también Ella, como toda creatura, el ser eleva a una santidad sobreeminente, y esto en atención a la proximidad excepcional con Cristo que le dan su título y su papel de Madre. Mucho antes de la definición del dogma, de acuerdo, es cierto, con una creencia extendida ya a la sazón, tanto el el pensamiento popular como en muchos teólogos, San Lorenzo se goza en proclamar la Inmaculada Concepción de María, apoyando esta doctrina en la interpretación de los textos escriturarios y en una tradición constante. “La plenitud de Gracia concedida a María desde el primer instante de su existencia la eleva sobre la riqueza general de gracias obtenidas por todos los santos juntos”. Por lo cual la Santísima Virgen posee todas las virtudes en un grado inconcebible y está muy junto a la Santísima Trinidad, de la que ha sido hecha indispensable auxiliadora, sin ser sin embargo un complemento necesario de ella.
    Madre del Redentor y Co-redentora, ha venido a ser a la vez Madre de todos los rescatados; y continúa trabajando en la salvación de ellos por su “mediación universal” soberanamente eficaz, puesto que nada puede negarle su Hijo.
    Desde el púlpito decía: “Todo don, toda gracia, todo beneficio que tenemos y que recibimos continuamente, nosotros los recibimos por María. Si María no existiese, nosotros no existiríamos y no habría mundo”. “Dios quiera —insistía él— que todos, todos, todos, y desde la infancia, aprendiesen bien deprisa esta verdad: aquel que se confía a María, que se entrega a María, no será jamás abandonado, ni en este mundo ni en el otro”.
    En fin, estando aparte de la humanidad pecadora por su origen y por su vida santísima, la Virgen María merecía escapar a la corrupción de la tumba que es el salario del pecado. Mucho antes todavía del dogma oficial, San Lorenzo afirma claramente la Resurrección y la Asunción de la Santísima Virgen. 
    Se recomienda el Libro "Marial" de este autor de la Biblioteca de Autores Cristianos.


    8 de noviembre de 2011

    Nuestra Señora del Rosario

    Fotografía de Nuestra Virgen en su procesión del año pasado